El fomentar que los empleados encuentren un equilibrio en sus vidas, se diviertan y se sientan bien tanto dentro como fuera del horario laboral es uno de los pilares de la cultura en redk

El pasado 16 de diciembre celebramos en Madrid un encuentro de team building navideño. Así, en redk pudimos despedir el año juntos, disfrutar de un evento distendido y desconectar del trabajo. Los profesionales de nuestro equipo español, que trabajan desde distintos puntos del país, pudieron compartir unas horas de diversión en el centro de la capital.

El teletrabajo es una de las tendencias más extendidas en el mundo laboral actual y por eso las sesiones de team building se han vuelto más necesarias que nunca. Participar en eventos en los que compartir y disfrutar de un tiempo fuera de la oficina con los compañeros de trabajo es una gran idea: permite que el día a día sea más llevadero y fomenta que los proyectos se aborden con mayor eficiencia.

Alegría y diversión, también en el trabajo

En realidad, uno de los principios fundamentales de la cultura de redk es que los empleados necesitan equilibrio en sus vidas, flexibilidad y, sobre todo, divertirse y sentirse bien tanto dentro como fuera del horario laboral. En este sentido, un evento de team building es esencial para el buen funcionamiento de los proyectos y la satisfacción de todas las personas con las que tenemos el privilegio de trabajar.

Además, estos planes son la ocasión perfecta para reunir a empleados de diferentes lugares, algunos tan apartados de la capital como Sevilla o Málaga. De hecho, el equipo de redk en España está repartido por toda la geografía nacional. Madrid fue el punto de encuentro para este evento, que habitualmente se celebra un par de veces al año.

El plan del día: bolos, cena y drinks

La primera parada de este encuentro navideño fue una bolera. ¿Qué mejor manera para crear espíritu de equipo que una animada partida de bolos? Como podrás ver en la galería que incluimos a continuación, el reto sirvió para olvidar la rutina y echar unas risas con compañeros a los que no vemos todos los días aunque estemos conectados con ellos.

Además, en esta misma bolera, los asistentes pudieron disfrutar de un catering para completar la experiencia. Más allá de alguna consulta puntual sobre el trabajo, esta pausa sirvió para compartir en equipo un merecido descanso. Como guinda final al evento, los compañeros de redk gozaron de todo un must de las calles madrileñas: salieron a tomar algo y disfrutar del gran ambiente que inunda las terrazas del centro de Madrid.

Aquí tienes un breve resumen en fotos.